El quito volumen de Corpus de Inscripciones Latinas de Cáceres corresponde al territorio de Augustobriga, que recoge en este corpus a grosso modo las actuales comarcas cacereñas de La Vera, Campo Arañuelo y Los Ibores-Jara. Aunque este territorio no define los límites de la antigua ciudad romana de Augustobriga, sí nos sirve, al menos, para completar el panorama epigráfico centrado en los cinco núcleos urbanos de época romana más importantes constatados en la provincia de Cáceres.
Especialmente desdibujadas se presentan las fronteras por su lado oriental, definidos artificialmente por la línea divisoria de las provincias de Cáceres y Toledo, que poco tienen que ver con las áreas de influencia de las antiguas ciudades de Augustobriga y Caesarobriga (Talavera de la reina).
Mucho mejor definidos están los límites por el norte, donde las escarpadas cimas de la Sierra de Gredos separan las tierras cacereñas de las abulenses. Los infranqueables picos impiden el paso hacia la provincia de Ávila y solamente el corredor del Tiétar permite el acceso desde el centro de la Península.
La Sierra de Tormantos y desde aquí una línea vertical en dirección a la confluencia del Tiétar con el Tajo, marcarían los límites por el oeste. Son tierras también montañosas las que jalonan por el norte la comarca de La Vera, aunque existen algunos pasos, nunca fáciles, hacia el Valle del Jerte.
Y al sur el altiplano trujillano-cacereño con el parque de Monfragüe, las estribaciones más septentrionales de las Sierras de Las Villuecas y la Sierra de Altamira, completan el territorio en que se enmarca este estudio epigráfico.