Trepidante novela de aventuras que retrata con humor, ternura e ironía los diferentes estratos sociales, desde los bajos fondos de la vida de la calle marroquí hasta la alta sociedad francesa y española, a través de la mirada de un niño pícaro tan inocente como el Lazarillo de Tormes, a quien la dureza de su existencia obliga a ser adulto antes de tiempo
Marruecos, España, Iraq y, en menor medida: Egipto, Italia, Turquía, Francia y Hungría —países que el autor conoce por su quehacer profesional— son algunos de los escenarios por los que se mueve nuestro protagonista Ismael en su lucha por la vida, mientras busca el arma del conquistador macedonio, Alejandro Magno. Quien la posea dominará el mundo.
Barrientos, considerado por la crítica el Dickens español, periodista experto en mundo árabe y profundo conocedor de las experiencias que viven muchos de sus chicos, tanto en su país de origen como en España, a quienes da voz a lo largo de este relato sin dejar ningún estamento de la sociedad por diseccionar, con anécdotas de la jet set o del intramundo periodístico.
Plagadas estas páginas de magia y esoterismo, el autor nos acerca a un mundo que nos remite a la historia y al misterio, como ocurre en Agatha Christie al ir resolviendo enigmas como el de la puerta cerrada por dentro...