Este libro no es de poesía. No obstante, el siguiente poema resume su contenido:
Sólo me queda tu voz
Cuando el frío de la injusticia
y la afonía me quiten la voz,
sólo me quedará tu voz.
Cuando las cadenas me asfixien
y eclipsen el sol de la verdad,
sólo me quedará tu voz.
Grité ¡¡JUSTICIA!! Pero nadie
me escuchaba,
ahora tengo la boca cerrada,
porque aunque llore con llanto
mi voz no será escuchada.
Pero algún día saldrá el sol
de la justicia, me liberaré de la
cadena perpetua y de las cadenas,
recuperaré mis palabras y mi voz,
y si no tu voz será mi voz.
El autor: Bushara Ahmed Gumaa.